jueves, 2 de febrero de 2012

EMPRENDIMIENTO - IDEA DE NEGOCIO


IDEA DE NEGOCIO



Toda idea de negocio es buena, lo único que hay que evaluar, es,  si es factible hacerlo en el espacio donde se pretende ejecutar la unidad de negocio.  Tener ideas de negocio es una de las principales características de una persona emprendedora.

No existen fórmulas para descubrir el negocio perfecto, pero sí un proceso para filtrar una idea hasta saber si es viable, rentable y duradera. Es decir una organización formal sostenible en el largo plazo.

Las ideas de negocio pueden provenir de diversas fuentes:

1.    Imitación. Es adaptar algo que se ha visto funcionar con éxito en otra localidad o plaza y que aún no existe en nuestro entorno.
2.    Demanda insatisfecha. Cuando se detectan quejas de un gran numero de clientes que se encuentran inconformes con los que reciben, o también cuando la unidad de negocio no da abasto el servicio  o el producto que ofrece.
3.    Afinidad. Es algo que le gusta hacer al emprendedor, es decir conoce a fondo la ingeniería del producto o servicio, por su amplio conocimiento puede proponer  innovaciones.
4.    Investigación de mercado. Es utilizado para descubrir en un determinado grupo de población está necesitando un nuevo producto o complemento del mismo. Existen varias formas de hacer investigación de mercado las mas utilizadas son las encuestas, la observación directa y las entrevistas a grupos focales.

Una idea de negocio debe ser analizada y estructurada con un modelo formal denominado Plan de Negocio.

Aterrizar su idea de negocio no es tan sencillo como decir “es una buena idea, tengo el dinero, montemos la empresa”. Existen muchas implicaciones legales, económicas y sociales, por lo que es recomendable tener en cuenta:
1.    ¿Qué oportunidad se ha identificado? Una idea de negocio debe surgir de una necesidad insatisfecha. Y se puede estructurar desde las diversas fuentes de la idea de negocio. Ejemplo de una Demanda insatisfecha o de una imitación de un negocio que le parece rentable. Si todavía no tiene una idea se recomienda ser curioso y estar atento sobre lo que pasa a su alrededor. No hay ideas malas solo hay que saber enfocarlas.

2.    ¿En qué consistirá el negocio?  Tenga claro qué es lo que quiere ofrecer y la satisfacción con dicho ofrecimiento; esa idea debe ser clara y concisa, entendible para todos los posibles actores que tomarán parte: futuros inversionistas, entidades financieras, clientes potenciales y  socios. Ellos son quienes, a través de una correcta descripción del negocio, se verán motivados o desmotivados a interesarse en el proyecto que finalmente se verá reflejado en un producto o servicio.
3.    ¿Quiénes son las personas que emprenden el negocio? Escoge integrantes de la familia o del círculo de amigos, a quienes conocen bien y en quienes confía. Es muy  importante que al asociarse con alguien sea consciente de que el principal capital de un negocio serán las personas que lo integran. Cuando se pregunte quienes serán los socios, valore que pueden aportar estos a la unidad de negocio o empresa (Conocimiento del sector, experiencia técnica, contactos o capital).

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